Misa 14 de agosto de 2022

Domingo XX del tiempo ordinario

He venido a prender fuego a la tierra

Papa Francisco:  Jesús revela a sus amigos, y también a nosotros, su má ardiente deseo: traer a la tierra el fuego del amor del Padre, que enciende la vida y mediante el cual el hombre es salvado.  Jesús nos llama a difundir en el mundo este fuego, gracias al cual seremos reconocidos como sus ver­daderos discípulos. El fuego del amor, encendido por Cristo en el mundo por medio del Espíritu Santo, es un fuego sin límites, es un fuego universal. Esto se vio desd los primeros tiempos del Cristianismo: el testimonio del Evangelio se propagó como un incendio benéfico superando toda división entre individuos, categorías sociales, pueblos y naciones. El testimonio del Evangelio quema, quema toda forma de par­ ticularismo y mantiene la caridad  abierta a todos, con la preferencia hacia los más pobres y los excluidos.

 

Antífona de entrada: Fíjate Dios en nuestro escudo , mira el rostro de tu Ungido . Vale mas un día en tus atrios que mil en mi casa